En muchas ocasiones el propósito de cubrir la piscina resulta más que complicado por la disposición de ésta en el terreno y en la situación de algún elemento que condiciona la ubicación de la cubierta de piscina.
Sin embargo en Pipor si en algo somos expertos es en acometer con las mayores garantías este tipo de situaciones de cubiertas de piscinas en proyectos a priori complejos.
Nuestro cliente quería que su cubierta de piscina pasase a formar parte del paisaje del su vivienda, acoplándose al entorno de su jardín y por supuesto con plena sintonía con su hogar.
Nuestro equipo técnico esbozó un diseño de la cubierta en líneas rectas y en tonos blancos, consiguiendo la plena mimetización con los tonos claros de la vivienda. De todas formas la complejidad radicaba en que la piscina no se encontraba alineada con el muro lateral por lo tanto la estructura podría quedar desalineada con respecto al otro lateral que correspondía a la línea visual de la vivienda. Para solucionar técnicamente esta disposición la solución fue la de diseñar una estructura poligonal en la que un lateral tendría 4 cuerpos y el inverso 5 cuerpos.
Los frontales de esta estructura se configurarán con 3 grandes paños de puertas deslizantes, resultando en conjunto una cubierta de piscina totalmente personalizada, con un diseño amable que cumple los requisitos de nuestro cliente y sobre todo nuestro deleite al ver que seguimos siendo capaces de conseguir la satisfacción de nuestros clientes ante proyectos de diseño e instalación de cubiertas para piscina difíciles de acometer.