Normas de seguridad en la piscina
Durante las vacaciones de verano a todos nos apetece darnos un chapuzón pero es importante tomar ciertas medidas de seguridad en la piscina para prevenir accidentes y sustos. Según el Informe anual sobre prevención de lesiones en niños, elaborado por la OMS, los ahogamientos son una de las causas principales de lesiones en los más pequeños. Desde Pipor te contamos qué precauciones se deben tomar.
Normas de la piscina
En primer lugar los niños nunca se deben bañar solos, siempre deberán ir acompañados por un adulto que los vigile. Olvídate de entrar y salir de la piscina, no hace falta que estés todo el tiempo dentro si el pequeño ya sabe nadar, pero es fundamental que lo vigiles constantemente. Además, es conveniente que los niños lleven manguitos o flotadores hasta que el niño aprenda a nadar bien.
Todos los juguetes, hinchables, etc. empleados durante el baño, deberán ser controlados y retirados del agua al salir de la piscina. También se intentará que molesten lo menos posible a la hora de nadar o de saltar para evitar golpes. Hablando de saltos, es recomendable no saltar de cabeza si no se conoce la profundidad de la zona, el golpe puede ser muy fuerte y provocar lesiones de gravedad.
Cuando somos niños no queremos esperar ni un minuto para meternos en el agua. Sin embargo, es importante que después de comer se espere un tiempo mientras se hace la digestión, es mejor meterse poco a poco, dejando que el cuerpo se vaya acostumbrando a la temperatura. Entrar de golpe puede suponer un cambio brusco y provocar un síndrome de hidrocución o shock termodiferencial, que sería el término adecuado para el mal llamado “corte de digestión”. Una de las causas que lo provocan sería una descarga brusca de histamina, molécula implicada en la digestión. Por tanto, procura que los niños entren en el agua progresivamente y esperen entre hora y media y dos para bañarse tras la comida.
Medidas de seguridad en la piscina para niños y adultos
Muchas veces solo tenemos en cuenta el interior de la piscina pero los alrededores pueden ser igual, o más peligrosos. En primer lugar, tenemos que asegurarnos que a la hora de instalar el borde de la piscina el material sea antideslizante. En caso de ir a una piscina donde el bordillo resbale, será recomendable evitar que los niños jueguen o corran por esas zonas y que vistan con calzado que no resbale.
Asimismo, el mantenimiento de una piscina va acompañado de una serie de productos químicos que son tóxicos. Es necesario avisar del momento en el que se añaden estos productos para que nadie entre en el agua, así como tener cuidado con su almacenamiento. Normalmente se guarda todo en el cuarto de la depuradora. Este, deberá permanecer cerrado de manera que ningún niño pueda acceder.
Es conveniente incluir marcas que indiquen la profundidad. De esta forma, se podrán evitar ahogamientos y golpes derivados de saltos o caídas. Estas señalizaciones deberán ser visibles desde el exterior de la piscina.
Por último, es recomendable que se emplee algún método para cubrir el agua. Desde Pipor te recomendamos nuestras cubiertas para piscinas. Las lonas pueden evitar que el agua se ensucie pero no hacen que la piscina sea menos peligrosa. Con la instalación de una cubierta de Pipor, evitarás ahogamientos y sustos, ya que tendrás la opción de aislar la piscina completamente del jardín u otra zona de juegos. Nuestros materiales son de la máxima calidad, utilizamos cristal laminado que hace que los cerramientos sean duraderos y funcionales. Además, mezclamos dos aspectos muy importantes, la estética y la funcionalidad. Basándonos en estos dos principios y trabajando con los mejores materiales y profesionales, conseguimos crear espacios únicos a medida.
Seguir con las normas de seguridad de la piscina y sobre todo, vigilar constantemente es vital. Si quieres aumentar tu tranquilidad y comodidad en términos de seguridad y limpieza a través de la instalación de una cubierta, solo tienes que contactar con nosotros. Desde Pipor estaremos encantados de crear un proyecto único para ti.